PUNTO PARTIDA:

En Lindes, en el concejo de Quirós (980 metros). Se toma en Bárzana la carretera AS-230 hasta Santa Marina, tomando aquí la carretera QU-4, que llega al punto de salida después de recorrer 13 Km.

DIFICULTAD:

Fácil.

DURACIÓN:

6 horas.

DESNIVEL:

1.169 metros.

CARTOGRAFÍA:

Adrados. Macizo de Peña Ubiña. Escala 1:25.000. También 77-II y 77-IV del IGN, escala 1:25.000.

DESCRIPCIÓN:

Iniciamos esta salida en el pueblo de Lindes (980 m.), por un camino carretero que se va elevando por las revueltas del Carrilón hasta una bifurcación. Por la izquierda prosigue el camino principal que asciende hasta la Cándana en dirección a los puertos de Agüeria.

Nosotros tomamos el camino hacia la derecha, remontando los recuestos de las estribaciones orientales de Peña Rueda, hasta llegar a Manín Fonderu (1.100 metros), conjunto de buenas cuadras de piedra. Con un giro a la derecha nos introducimos en un típico bosque por el que avanzamos alcanzando Manín Cimeru (1260 m), donde hay una cabaña solitaria. Nos dirigimos por marcado sendero, bajo los derrumbes de Las Becerreras, a la parte alta de la Vallina Grande, para, una vez superada, llegar a la plataforma inferior de Peña Rueda (Campa los Texos 1680 m).

Aquí por la izquierda afrontamos la subida por el crestón meridional cuyas paredes vierten a la Foix Grande, hasta alcanzar el curioso accidente geológico que forma el Vaso de Rueda; por la arista cimera alcanzamos la cima de Peña Rueda (2.155 m.). Las panorámicas desde esta elevada cima son espectaculares: Puertos de Agüeria, Fariñentu, Siegalavá, Huertos del Diablo y, un largo etc.

Bajamos hacia el Oeste, en principio por Las Lleras, para más adelante desviarnos a la derecha a Las Colladiellas (1620 m), dejando a la izquierda el Cueto La Siete, por camino que discurre por monte bajo, llegamos al Collado Fondero(1300 m). Aquí lo natural sería seguir por el ancho camino que llega a las cabañas de La Mortera, pero como todo el año se encuentra con medio metro de barro, cruzaremos por las cabañas del Picón para salir igualmente a la majada La Mortera.

Un camino erosionado por la lluvia nos lleva a La Campretona (1100 m), donde cogemos un camino empedrado muy empinado que nos deposita en Cortes (860 m).



La alternativa mucho más sencilla es:



DIFICULTAD:

Fácil.

DURACIÓN:

5 horas.

DESNIVEL:

943 metros.

DESCRIPCIÓN:

El comienzo de la ruta esta señalizado al final del pueblo, se comienza en suave pendiente para un poco más adelante comenzar una fuerte subida que en unos diez minutos nos lleva a un cruce señalizado que indica a la derecha la subida a Peña Rueda y a la izquierda la ruta que debemos seguir.

Tomamos a la derecha subiendo para enseguida llanear un buen rato. Un poco más adelante comenzamos otra subida fuerte que nos lleva a la Collada donde a la izquierda hay un desvío señalizado a la vega de Manin.

Comenzamos aquí una bajada hacia la Foz Grande para llegar a un vado del río sin puente que debemos cruzar para continuar del otro lado. Seguimos la senda muy marcada que nos lleva por la margen derecha hasta salir de la Foz, al final debemos cruzar de nuevo el río para seguir de nuevo la pista que se reconoce bien.

Entramos en el valle por la parte baja con varias praderías separadas por bosques de Brezos, Piornos y escobas que son muy complicados de atravesar salvo por el camino marcado, es preferible perder diez minutos en buscar la senda adecuada que una hora tratando de atravesar la pesadilla que constituyen estos bosques.

Por la parte baja de la pradería buscamos el camino más marcado, ancho y limpio de obstáculos, va subiendo muy ligeramente por los Cuadros, pasamos algunos restos de cabañas por el centro de ellas más o menos sigue el sendero.

En la segunda pradería llano la Carba hay unos restos de cabañas, el sendero pasa por debajo de una enorme roca en la parte derecha de la pradería. Tras unos pocos metros más pasamos al llano de la Piornal con una cabaña larga entre el bosque a la derecha arriba, por la parte de abajo de la cabaña seguimos a un regato por el que sigue el sendero con una subida más fuerte para salir a otra pradería que tiene una pequeña roca marcada con pintura, la senda sigue por la izquierda debajo del bosque en llano, no seguir la senda que se ve en fuerte subida a la derecha.

Llegamos tras un buen rato siguiendo la marcada senda y a veces el curso de algún regato hasta la Cardosina por donde entramos debajo de la cabaña más baja. Nada más pasar la cabaña a la derecha por la pradería en fuerte subida sigue la senda muy poco marcada, apenas visible que debemos seguir. La tomamos y en apenas diez minutos nos situamos en el alto de la collada del Lingleo, divisoria de los puertos de Agüeria en los valles que caen hacia Lindes, por la Foz Grande, o hacia Bucida y Ricabo.

Buen lugar con una panorámica en la que se abarca desde los Puertos de Agüeria, desde la Foz Grande en el extremo izquierdo a las últimas estribaciones del Campu Faya a la derecha.

Se sigue el camino perdiendo unos metros en dirección Ricabo para tomar un sendero que en llano va bordeando poco a poco Peña Rueda y que pasando sobre la majada de Buxalve va buscando la pista que se aprecia hacia la derecha.

Una vez en la pista (1.530 m) la seguimos durante unos cientos de metros para tomar al poco, a la derecha, un marcado sendero que sube a la collada de Las Colladiellas (1.561 m) y que nos da vista ya al valle de Cortes, el del valle del río Buseca, con vistas ya sobre la cara norte de Peña Rueda.

El sendero sale por la izquierda y casi en llano va recorriendo la zona alta del valle con los bosques ofreciendo mil tonalidades, hasta salir a la preciosa vega de Cabón, colgada en una amplia collada de vistas increibles y con restos de numerosas cabañas, todas ellas redondas y sin restos de cubierta de pizarra o teja, lo que me hace pensar que en su día tuvieran cubierta vegetal. Pequeños teitos.

Por la derecha de la majada, entre acebos, sale un sendero que pierde altura rápidamente y que tras pasar bajo nuevas cabañas de la misma majada, retoma dirección valle abajo, con poca pendiente en busca de una nueva collada, el Collau Cimeru, con una buena cabaña.

Desde este punto el sendero retrocede valle arriba y pierde altura con mucha rapidez, bordeando varias fincas hasta, ya cerca del río, salir a otro sendero que por el fondo del valle, desciende cerca del río. Se alcanzan así las cabañas del El Bauchal, de nuevo a bastante altura sobre el río.

Allí el sendero cruza un espolón de la foz que empieza a cerrar el fondo del valle, por medio de buenas armaduras y bordeando el Picón, a la izquierda, emprende un fuerte descenso en zigzags hacia el fondo del valle.

Al poco damos vista ya a Cortes, aunque aún queda bastante por descender, sobre las estrechuras del valle por el que se descuelga el río de Buseca.

Ya bastante abajo llegamos al Pozo del Oro, antigua mina de tan preciado metal, con ruta perfecta hasta Cortes.